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Internet nació abierta, el acceso a la misma se concibió universal y libre. Desde la propia invención de Internet, sin embargo, dicho acceso se ha visto sujeto a múltiples amenazas, en especial procedentes de Estados y de diversos intereses económicos. Tales amenazas han venido poniendo en riesgo sus llamadas tres capas (lógica, física y contenidos). Organizaciones y otras entidades internacionales, junto a distintos gobiernos, vienen reaccionando frente a estos riesgos, a través de diversas medidas que, a la vez que operan en esas tres capas, se han extendido a cada vez más ámbitos de regulación, y que, en algunos casos, resultan prometedoras para el acceso a la Red. Lejos de implicar nuevas amenazas, también las tecnologías de mayor potencial disruptivo para el entorno digital podrían implicar mejoras en el acceso a Internet.

Pablo García Mexía. Jurista Digital, Vicepresidente de la Internet Society