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Una vez implementado BEPS en algunos países, a veces con soluciones no siempre alineadas con el proyecto de la OCDE, se pueden analizar las consecuencias del mismo.

Una de las conclusiones alcanzadas a nivel internacional es la falta de regulación para determinadas formas de hacer negocios, como es el ámbito digital, por lo que se han continuado los trabajos en esta línea.

La OCDE acaba de publicar una propuesta de documento en el que se vierten las diferentes alternativas que se plantean para la “tributación de la economía digital”. Sin embargo, el documento va más allá y lo que se propone es un cambio de planteamiento a nivel global, no sólo para el mundo digital.

Además de plantear nuevos criterios de gravamen, que otorgarán potestades tributarias a los países en los que se consumen los bienes o servicios, la OCDE recomienda la aplicación de una suerte de transparencia fiscal internacional reforzada, que acabaría afectando a los grupos españoles con filiales extranjeras.

Todos estos cambios tienen un impacto directo en el incremento de la litigiosidad y en la erosión de la seguridad jurídica.

En esta sesión comentaremos, de la mano Luis Jones, Director de la Oficina de Fiscalidad Internacional, las principales novedades planteadas por la OCDE en este ámbito, así como las opciones existentes a día de hoy para adelantarse al posible impacto que puedan tener las normas actuales o las futuras y el papel que juega la ONFI en este escenario de incertidumbre en la Administración española.