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En 2015, cuando decidimos organizar el primer Congreso de Primavera, teníamos claro que no queríamos hacer un evento formativo tradicional. Queríamos hablar de otros aspectos de nuestro oficio, de la parte empresarial y mercantil, de cómo gestionar nuestro despacho, de la faceta emprendedora del jurista, de nuevas formas de ejercer y entender la profesión, de nuevos modelos de negocio…

Y así nació el Congreso de Primavera, uun congreso organizado por abogad@s y para abogad@s, pero en el que no se habla de Derecho. Un congreso para abogados inquietos.

Haciendo una retrospectiva, hemos de decir que hemos tenido muy buen ojo con las tecnologías sobre las que hemos puesto el foco: hemos hablado de blockchain y criptodivisas, algunos de los temas más en boga en la actualidad, o de legaltech, un sector que está empezando a despuntar, y este año hablaremos del impacto que tendrán la inteligencia artificial y la robótica en la abogacía.

Tampoco nos ha ido mal con los temas de gestión y marketing, hemos hablado, entre otros, de diferenciarnos aportando valor al cliente y no a través del precio, de qué es y cómo crear nuestra marca personal, también hemos explicado cómo realizar un correcto uso de redes sociales en beneficio de nuestros despachos o de cómo calcular los honorarios.

Pero, en un mundo en constante evolución, nosotros no nos podemos quedar estancados, por lo que este año hemos decidido dar una pequeña vuelta de tuerca tanto al formato, incluyendo talleres prácticos por las tardes, como a los temas, aunque sin perder de vista los objetivos con los que nació este congreso: mostrar nuevas oportunidades de negocio y hacer que nuestro despacho sea cada vez más eficaz.